lunes, agosto 27, 2007

La Calcinación del Materialismo

The Secret Source
The Law of Attraction is One of Seven Hermetic Laws: Here Are the Other Six

Edited by Maja D’Aoust, Adam Parfrey and Jodi Wille
Aquí, también debemos mantener en perspectiva el hecho que la adquisición de riqueza no es necesariamente "un beneficio", y no puede resolver nuestros problemas más profundos. El las antiguas enseñanzas herméticas y alquímicas se no dice exactamente lo opuesto, no hay que buscar conseguir todo lo que deseamos, al contrario, tenemos que frustrar nuestros deseos al no dejarnos llevar por ellos. Carl Jung extrapola este concepto hermético en sus obras sobre psycología y alquimia. Es precisamente la frustración de los deseos que crea suficiente tensión y calor para llevar a cabo la etapa de calcinación de las operaciones alquímicas:

La frustración necesaria de los deseos o complacencias es la principal característica de la etapa de calcinación. Primero se debe localizar la sustancia; esto es, el deseo oculto del subconciente que está demandando ser reconocido y afirmado. La urgencia instintiva que dice "quiero" y "estoy destinado a hacer esto" debe ser completamente aceptada por el ego ... Como regla, la realidad de la vida, si se acepta, provee muchas oportunidades para la calcinación de deseos frustrados ... cuando se niega, se vuelve furiosa. Esto es el homólogo psicológico de la "Ira Divina" que quemaba a Cristo. La realidad muchas veces genera fuego retando o negando las demandas de cumplir los deseos. Cuando se le niega la justificación, el deseo frustrado se convierte en el fuego de la calcinación ... el fuego de la calcinación purga esas identificaciones y saca su raíz.

En un nivel personal, esperar riqueza fácil combinado con un sentido de propósito absoluto indica un crecimiento psicológico frustrado y un sentido de fracaso si los deseos no se cumplen. Y no es necesario remarcar que el mensaje de la Conciencia de la Prosperidad, de que todos debemos saciar nuestros deseos consumistas sin restricción ignora el hecho de que nuestro pequeño planeta tiene limitaciones físicas y que actualmente se encuentra al borde de reacciones potencialmente cataclísmicas contra sus seis mil seiscientos millones de ocupantes humanos, acaudalados o no.